Cómo el IVE recicla sus fracasos como victorias, exhibe “trofeos de redención” y nunca reflexiona internamente.
A fines de los años noventa, Fernando Caretta, entonces sacerdote del Instituto del Verbo Encarnado (IVE), protagonizó uno de los mayores escándalos internos de la congregación: durante su misión en Ecuador, tras iniciar una relación con la maestra de novicias de las Servidoras del Señor y de la Virgen de Matará (SSVM) —rama femenina del mismo instituto—, abandonó repentinamente el ministerio y huyó del país con la dicha maestra de novicias hacia Argentina. El hecho provocó un terremoto en los círculos internos del IVE.
(más…)








