Reproducimos aquí este artículo publicado por InfoCatólica. Consideramos que esta congregación tiene muchas semejanzas con el grupo que nos atañe en este blog.
(Agencias/InfoCatólica) La archidiócesis de Liubliana (Eslovenia), informó el viernes que el Dicasterio para las Instituciones de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica disolvió el 20 de octubre pasado la Comunidad Loyola. La decisión fue comunicada a las hermanas el 14 de diciembre por el padre Amedeo Cencini y la hermana Marisa Adami, actuales ejecutores vaticanos en este caso. Aunque las religiosas, al residir fuera del país, no pudieron acudir personalmente a la archidiócesis, se conectaron en línea para conocer el decreto de disolución, el cual deberá hacerse efectivo en el plazo de un año.
El arzobispado de Liubliana explica que en 2019, el arzobispo Stanislav Zore realizó una visita a la Comunidad, de cuyos resultados se informó al dicasterio en febrero de 2020. Dado que la casa general está en Roma, el informe fue remitido a la diócesis del Papa, la cual nombró a un comisario, el obispo auxiliar y jesuita Daniele Libanori. En septiembre de 2022, monseñor Libanori envió sus conclusiones al Dicasterio de Vida Consagrada. Un año después, el 20 de octubre, se decretó la disolución debido a «graves problemas relativos al ejercicio de la autoridad y al modo de vida comunitaria».
La Comunidad Loyola fue fundada en los años 80 por la hermana Ivanka Hosta y el entonces jesuita Marko Rupnik, siendo reconocida en 1994. Se acusa al sacerdote y artista Rupnik de abusos, principalmente contra religiosas de este instituto, que presentaron las primeras denuncias contra él.
Rupnik dejó de ser capellán en 1993 y se trasladó a Roma con parte de las hermanas, fundando el Centro Aletti, una escuela de arte y teología donde también se han denunciado abusos. El vicariato papal declaró el 18 de septiembre que actualmente en el Centro Aletti «existe una sana vida comunitaria sin problemas particulares».
El padre Rupnik fue expulsado de la Compañía de Jesús el 15 de junio de 2023 por no cumplir las obligaciones que le habían impuesto restringiendo su libertad de predicar ejercicios o retiros espirituales o desplazarse fuera del lugar de residencia establecido, como medidas sancionadoras y/o cautelares. Está incardinado desde agosto en la diócesis eslovena de Koper. El 27 de octubre, el Papa solicitó a la Congregación para la Doctrina de la Fe, dirigida por el cardenal Víctor Manuel Fernández, que revisara en su totalidad el caso Rupnik tras conocerse el escándalo de que este obispo esloveno le había incardinado sin mayores problemas, después de haber sido excomulgado y perdonado, y haber sido expulsado de los Jesuítas.
En cuanto a la hermana Hosta, superiora general de la Comunidad Loyola desde 1994, tras ser investigada fue apartada del gobierno en junio pasado y no podrá contactar con ninguna hermana actual o anterior durante tres años.
La casta carismática del Instituto del Verbo Encarnado se niega a obedecer a su nuevo superior general y su gobierno. La Iglesia toma medidas al respecto.
El Cardenal Santos Abril y Castelló, actual superior general del Instituto del Verbo Encarnado, envió un extenso comunicado con fecha 21 de noviembre de 2023, explicando a todos los miembros las decisiones que se deberán llevar a cabo en orden a ayudar al IVE a poner en regla todo el desorden que durante años han tapado tanto el fundador como la «casta iveísta».
En la misiva enviada, y que el lector podrá leer más abajo, solo remarcamos aquí la actitud contestataria del IVE, y la falta de obediencia que se transmite al resto; un grupo de superiores provinciales negacionistas que no quieren obedecer lo que el nuevo consejo general del Instituto les pide. No solo que no obedecen sino además critican y hasta se burlan como vimos en el video del provincial de Argentina, imitando al Cardenal y burlándose de el.
El Padre Francisco (alias «Franco») Liporace, provincial del Instituto del Verbo Encarnado para el Norte de Europa, presentó un recurso de amparo al Comisario y al Dicasterio pidiendo que se revoquen las decisiones del Comisario.
Recordemos que el IVE sin autorización del comisario se largó a fundar casas desde 2019 en adelante, tratando de expandirse lo máximo aunque sea con un solo miembro en la comunidad. Obviamente contrario a las Constituciones y sin autorizaciones de su actual superior general, el Comisario Pontificio. Lógicamente ante esto el Cardenal mandó a cerrar esas nuevas fundaciones.
La casta que siempre comandó el IVE y quieren seguir siendo el gobierno en la sombra, rechazó esto a través de la figura del Padre Franco Liporace, compañero de curso de los Padres Gustavo Nieto, Ricardo Clarey, Diego Pombo , etc., y cercano al Cardenal McCarrick, con quien estuvo a cargo de la pastoral hispana en la Arquidiócesis de Washington (Estados Unidos). Digamos no es un novato, sino del grupo de la «casta intocable». Hoy levanta su voz en nombre de todos, Pero no recibió la respuesta que esperaba.
Por supuesto el Dicasterio respondió recordando que el Comisario es el nuevo superior general y tiene todas las facultades para hacerlo, que el derecho canónico lo respalda y que ¡por favor obedezcan y se dejen ayudar y colaboren!
Otro llamado de atención a las continuas desobediencias de este grupo que más actúa como una secta dirigida por unos 20 «manijeros» que no concuerda con lo que ellos mismos enseñan a sus súbditos y predican en los Ejercicios Espirituales de San Ignacio, el famoso «Sentir con la Iglesia».
En el mismo comunicado, también el cardenal habla de:
Reorganizar las provincias, unificarlas (el Instituto del Verbo Encarnado llama «provincias» a agrupaciones de casas que en cualquier congregación religiosa normal no constituiría una provincia).
Revisar los tiempos de formación; de hecho no tienen estipulado el tiempo de postulantado; los que entran a los meses e incluso días reciben la sotana.
También hizo notar en la carta que aunque son muchos los que ingresan son muy numerosas las deserciones y se está sobrecargando de trabajos a los miembros.
Se decidió que a partir de ahora los seminaristas del seminario de Montefiascone, Italia para que se puedan ordenar deberán tener su formación filosófica y teológica en el seminario diocesano de Viterbo. Y esto se seguirá implementado en otras partes del mundo.
Dentro de poco el Cardenal y su consejo anunciará los nuevos provinciales y delegados del IVE, que puedan ayudar en el crecimiento y cambio que el IVE debe hacer para dejar atrás su tendencia de silenciar los abusos.
En fin, aunque el Cardenal trate de ponerles límites, no sé si el árbol torcido podrá enderezarse.
El Padre Miguel Fuentes, creador de la página Web «El Teólogo Responde», estudió en Roma teología moral y familia. Luego de sus estudios lo enviaron a San Rafael, al seminario mayor del Instituto del Verbo Enсarnado, donde prácticamente pasó toda su vida sacerdotal. Tal vez eso explica su carácter hosco y poco sociable: nunca fue destinado a una de las misiones que tiene el IVE, tampoco a parroquias con un trabajo pastoral en contacto con la realidad (la Parroquia «Nuestra Señora de los Dolores», que se sitúa dentro del predio del Seminario Mayor del Instituto del Verbo Encarnado en Argentina, no puede decirse que sea una parroquia como «normal», ya que es asistida por todo un seminario y es muy poca la concurrencia laical que tiene).
Cuando el Instituto del Verbo Encarnado comenzó con muchísimos problemas morales entre sus miembros, fue el Padre Miguel Fuentes quien comenzó a tratar y asistir a cientos de religiosas y sacerdotes. Él mismo aconsejó y se hizo cargo de abrir la famosa residencia, una casa para el tratamiento de religiosos con problemas sexuales, depresión, problemas vocacionales etc… A todo aquel que tenía problema en su comunidad y que los superiores no sabían qué hacer se lo enviaba a esa residencia.
El Padre Fuentes, junto a algunos laicos (el Dr. Jorge Randle, padre de varios religiosos del IVE) llevó a cabo esas dos casas: una para los sacerdotes, otra para las religiosas. Lamentablemente no todos los que han pasado por ahí tienen buenos recuerdos de esas «terapias», no aprobada ni por la iglesia, ni por las autoridades sanitarias argentinas.
Un método de terapia al estilo de un ejercicio espiritual, con tiempos de silencios, de charlas de este mismo sacerdote y del que incluso medicaba en algunos casos, el Doctor Jorge Randle… todo en una ambiente de secreto estricto de los que pasan por ese lugar. Ya que son algunos meses sin conexión con el resto, aislados de todos.
Aquellos que tenían un estado depresivo, lo alojaban en esa casa sin contacto con los demás, recibiendo sermones de todo lo mal que hicieron, haciendo penitencia, leyendo los libros solo permitidos pel Padre Fuentes, hablando en consulta solo con ellos… sin ver a nadie más.
Un tratamiento muy cerrado que en algunos casos despues de meses de mal trato psicológico para algunos, lograron escaparse (literalmente) y luego de eso pidieron la dispensa de sus votos. De 30 religiosos que han pasado por esa residencia, solo el 3% agradece su paso por ahí; el resto tienen muy malos recuerdos, abrumadores para su psicologia cansada y enferma, por una vida religiosa totalmente estructurada y estresante.
En este video que el sacerdote publica, se enorgullece de los 30.000 emails que respondio a sus preguntas ,ayudando a tantos laicos… Yo me pregunto, y le pregunto a los religiosos de su congregación:
¿Por qué no pudo dar respuestas a las tantas consultas que recibía de los religiosos que le contaban los abusos sexuales, psicológicos, los escándalos de que eran testigos en las misiones por parte de sacerdotes, por parte de algunos superiores enfermos, por falsas vocaciones que eran manipuladas?
El mismo Padre Fuentes, a sus dirigidas, les aconsejaba ir contra su voluntad: «si te cuesta estar encerrada, reza, ofrécete a ser contemplativa», logrando así el quiebre psicológico de muchas, que sí obedecían pero después empezaban con un montón de problemas de salud, ya que ese no era ni su temperamento ni su vocación.
Lo mismo con las misiones: «hay que ofrecerse a lo que más te cueste». Pero él nunca salió a una misión ni vivió en un monasterio. Él sí tiene clara su vocación; dar charlas morales y preparar clases. Y que nadie lo saque de esa «misión» por que ahí si conocerán su verdadero carácter.
30 años del «teólogo inmoral», digamos… ya que en esos 30 años podría haber ayudado a tantos que no hablaron en confesión sino en consultas…
Le trajeron denuncias, problemas graves morales dentro del Instituto; y en vez de actuar, denunciar, ayudar a las víctimas, tuvo la cobardía de enviarlos a la residencia, aconsejarles que guarden silencio, que no se metan, o que dejen la vida religiosa.
Su silencio lo hizo cómplice en muchos casos. Mantenía en la residencia sacerdotes acusado de abusos a menores y decía que luego de su tratamiento se habían curado y los devolvía a las misiones. Jamás se lo escuchó dar una charla sobre cómo actuar con los casos de abusadores o de abusados. Todo eso se silencia. Tal vez por eso sigue siendo el gurú del IVE. Por que no se mete y tapa lo que tiene que tapar.
Yo le diría, irónicamente
Padre Miguel Fuentes:
«Feliz 30 años de silenciar conciencias, feliz 30 años de tapar los abusos en el Instituto del Verbo Encarnado. ¡¡¡Lo hizo bien!!!».
Siga adelante. La máquina de destruir personas y devolverlas destrozadas al mundo rotas ha funcionado.
Ya son más de 500 entre el Instituto del Verbo Encarnado y las Servidoras del Señor y la Virgen de Matará «fuera del sistema».
Publicamos aquí una traducción del artículo publicado por Kelly Sue Fitz (ex Madre Lumen) en su blog, originalmente en inglés. Gracias Kelly Sue por autorizarnos a publicarlo aquí.
En los últimos meses he estado sumergida en el «trabajo en la sombra» y me he dado cuenta que, incluso, cuando uno cree que has superado todo, siempre queda algo más por superar. Y ese algo para mí ha sido el tiempo en que pasé en el convento.
Hasta ahora creo que nunca di voz suficiente a la injusticia real y a la imagen completa de abandono y disfunción que viví y que se vive allí.
Y aunque he escrito blogs, he hecho vídeos e incluso escribí una carta pública de 3 páginas a mi ex Congregación en el año 2015, rara vez he publicado los detalles crudos y descarnados, quizás, por tratar de ser algo respetuosa, supongo, obedeciendo a ese arquetipo de «niña buena», que aún vive en mí.
He de decir que resulta difícil, muchas veces, contestar a la pregunta: «¿Por qué dejaste el convento?», elaborar una respuesta elevada, según a quién no es posible, así que, suelo contar una versión abreviada y digerible, pero una ex hermana una vez me recordó la importancia de no minimizar lo sucedido, sobre todo, para mí misma. Así que, estoy intentando canalizar la guerrera y la bruja que vive en mi interior para hacer un informe más completo de lo ocurrido. Además, me he dado cuenta a lo largo de esos años que, al intentar contenerme, no se ha visibilizado y validado suficientemente mi testimonio.
Parte de «mi sombra» con la que he estado trabajando recientemente es el peso que cargo en mi entorno por ser considerada «perezosa», ya que, no concibo trabajar a tiempo completo nunca más, y no lo he hecho desde el año 2019, pero ¿será que si el mundo supiera por lo que he pasado en pocos años, pero de forma tan intensa, mi deseo de no volver a trabajar a tiempo completo sería validado?
Parte de ese mi «trabajo en la sombra» es justamente asumir esa «sombra» y poder salir de ella, es un intento de dejar esa sombra de chica perezosa, pero yo sé que solo es una parte de mí, pues hay una otra parte que sabe y conoce que existe un ritmo natural en cada uno de nosotros que también debe ser buscado, reconocido y obedecido.
Las semanas laborales de más de 40 horas pueden ser consideradas ridículas para cualquier ser humano, si nos fijamos en que también estamos hechos para disfrutar de nuestros seres queridos, cultivar dones, cultivar la naturaleza, etc y no solamente estar sentados frente a la computadora dedicando horas en conseguir dinero para seguir sobreviviendo, pero por desgracia, vivimos en 2023 y para la mayoría de nosotros es un constante tira-y-afloja, el sobrevivir y tener tiempo para hacer cosas que nos gustan con las personas que amamos.
De todos modos, que este escrito también sirva cómo una llamada a las SSVM (otra vez), y sea un intento de validar mi yo más joven que en esa época necesitaba que alguien luchara por ella y no encontraba a nadie.
Convento St Paul, hacia 2009
Este será mi mejor intento de hacer una lista de aquellos años de «espectáculo de mierda»:
• A los 26 años, fui nombrada Madre Superiora del convento de East Harlem, Nueva York, siendo la más joven de esa comunidad, tanto en edad como en vida religiosa, sin haber hecho aún los votos perpetuos. En una gigantesca parroquia bilingüe.
• Al cabo de un año, me enviaron a una hermana que había sido diagnosticada con trastorno límite de la personalidad. Era argentina y tenía unos 30 años, había hecho sus votos perpetuos y había estado causando malestar en las casas de formación de Washington, donde había estado viviendo. Mis superioras me la enviaron a mí, diciéndome: «Lumen, tú eres tan tranquila, estamos seguras de que podrás manejarla», y me dijeron que leyera el libro; «Walking on Eggshells» para mejor prepararme y poder tratarla. A esas alturas me sentía «tranquila», pues creo que ya estaba viviendo en una constante disociación con la cantidad de cosas que iba ocurriendo.
• No se me permitió informar a la comunidad sobre el diagnóstico de esta hermana, por lo que esencialmente tuvieron que sufrir su ira, sus arrebatos y el malestar que esa hermana provocaba, sin entender por qué nadie hacía nada al respecto.
• Diariamente yo tenía largas sesiones de diálogo y escucha con ella —a veces hasta 2 horas seguidas— mientras ella lloraba encerrada en su mundo emocional de auto-odio, absorbiéndome, quitándome la energía y el tiempo que tenía que disponer también a las demás hermanas de la comunidad.
• Iba a un psiquiatra y tomaba varios medicamentos psicóticos, también le fue sugerido una terapia dialéctica conductual residencial debido a la gravedad, yo a su vez pedí esto por escrito para presentarlo a mis superioras cómo una prueba de su gravedad. Las superioras lo denegaron por motivos económicos, pero tampoco quisieron enviarla de regreso a su casa, así que tuvo que seguir en mi comunidad, tomando sus medicaciones y haciendo terapia de conversación una vez a la semana, lo que no sirvió absolutamente de nada. Esto duró 2 años sin ningún control, mientras yo poco a poco «perdía la cabeza».
• Esta hermana tenía regularmente arrebatos a causa de su trastorno, tanto conmigo cómo con el resto de la comunidad, aparentemente por nada o por pequeñas cosas, cómo por ejemplo, que una hermana doblara mal las toallas.
• Muchas veces se encerraba en el baño durante horas o se golpeaba la cabeza contra la pared repetidamente para hacerse daño; todo tipo de locuras.
• Aparte del libro, no me dieron ningún tipo de preparación o apoyo para ayudarla. solo me decían: «No te tomes nada de lo que diga o haga como algo personal, es su enfermedad».
• Además era una hipocondríaca furiosa. Llegó con alergias alimentarias, le extirparon la vesícula biliar cuando yo estaba a cargo de la comunidad, fuimos a docenas de especialistas en NY en el transcurso de sus 2 años conmigo en Harlem.
• Por no hablar de que constantemente me llamaba mientras yo trabajaba en la oficina de Catecismo parroquial (sustituyendo a otra hermana que se marchó durante un año y a la que no se prestó tampoco ningún apoyo —pero sobre esto más adelante—) quejándose de dolor, apartándome del trabajo o lo que parecía ser más probable, simplemente intentando llamar mi atención, como suele ocurrir con personas con trastorno límite de la personalidad a la persona que tienen de apoyo.
• Pasaron muchas cosas en ese primer año, pero recuerdo que otra hermana de mi comunidad necesitaba regresar a Argentina para apoyar a su madre por un tiempo indefinido. Esta hermana era la responsable del catecismo en la parroquia, el apostolado era muy grande y el trabajo era a tiempo completo, pues había más de 400 niños y más de 50 catequistas en un programa bilingüe (español los sábados e inglés los domingos). ¿Adivinen quién debía cubrir su puesto mientras ella estaba de licencia indefinida? Sí, yo.
Pedí apoyo a las superioras porque, literalmente, me estaba volviendo loca. Mis superioras sabían lo difícil que era tener una hermana con un trastorno límite de la personalidad dentro de la comunidad, por tanto, ¿Cómo podían pensar que yo pudiese asumir una responsabilidad más y reemplazar a esa hermana que faltaba asumiendo también el papel de directora de Catecismo a tiempo completo?
A final me enviaron una hermana que me ayudaba a tiempo parcial, fue para mí una verdadera bendición, pero no lo suficiente, porque para mi sorpresa ella también estaba enferma y muchas veces necesitaba ausentarse, hasta que finalmente acabó por abandonar la vida religiosa (hoy se encuentra mejor, curada y prosperando en su vida). Conclusión: tuve que cubrir este puesto a tiempo completo durante todo el año catequético, junto con la gestión de la hermana enferma y el resto de las hermanas de la comunidad, sin contar que también era la responsable a nivel de provincia de la parte litúrgica, planificaba toda la liturgia cantada para las fiestas, misas de votos y eventos, donde reuníamos a cientos de personas.
Ensayo del coro, 2010
Además, ser superiora de una comunidad que ya conlleva sus propias responsabilidades que, abarcan a todas las hermanas, reuniones de superioras, funciones de liderazgo, etc. dentro de todo era la parte más fácil, pero no significaba que no hiciera nada; el apostolado era muy grande y había que constantemente preparar y organizar clases en la parroquia, retiros para jóvenes, niños etc. Siempre había mucho por hacer.
Pero, ¿había alguien escuchándome?
¡Y no he acabado aún!
• Mis superioras parecía ignorar todo lo que yo decía. Me comunicaron que tenía que viajar à Argentina y acompañar a la hermana enferma para que se hiciera ver con un médico de allí. Debíamos quedarnos en la casa de su tía en Buenos Aires durante unos días, para que el médico le hiciera algunas pruebas, mientras ella tomaba sus medicaciones, no recuerdo bien qué medicaciones eran, pero no estaban relacionados con el trastorno que tenía, sino con su salud física, así que viajamos hasta allí e hicimos todo lo que se necesitaba, no fue fácil y tuvimos muchas peleas durante el viaje.
En el último momento, quiso que le acompañara a visitar a su familia a otra región de Argentina (¿a visitar su familia negligente y disfuncional?). Este es el amor/odio en las relaciones entre una persona con trastorno límite de la personalidad y las personas que las cuidan, un día te odia y al día siguiente, están súper apegados a ti (no es de extrañar su temor a las relaciones humana).
En ese momento me dije a mí misma: «ni pensar, no voy. Ellos literalmente son la razón por la que eres cómo eres». No se lo he dicho, pero era la verdad.
Le rogué a mi superiora que me dejara volar sola de regreso a Nueva York, y me concedieron. Así que volé de Buenos Aires a Nueva York y apenas llegué, le rogué a mi director espiritual (un sacerdote del IVE), que urgentemente hiciera algo por mí, o se iba esa hermana de la comunidad o me sacaran a mí. ¡Yo ya no podía más!
Finalmente, gracias a sus súplicas (y lo que es más impresionante, hizo falta que un hombre dijera algo para que por fin tomaran alguna providencia), la enviaron a la Casa Provincial (a 4 manzanas de distancia).
• Unos meses más tarde, pedí un tiempo para descansar y me enviaron a Avondale (Pensilvania), para ser la directora de Catecismo de allí. ¿Si eso les parece un descanso? Avondale era otra parroquia enorme y la directora de Catecismo era una responsabilidad igual de grande y a tiempo completo. Por lo tanto, no sólo desempeñaría ese papel, sino que, a diferencia de Harlem, tendría que aprender nuevas forma de hacer las cosas, conocer a todos los nuevos profesores, familias, etc. Cada parroquia es un mundo diferente con sus propias reglas. ¡Sí, genial, muchas gracias por todo!
Dejé la vida religiosa sólo 2 meses después de mi traslado y todo empezó a desmoronarse en mí apenas un mes después de estar allí. Empecé a llorar a diario, no podía comer, no podía sonreír, no tenía energía ni afecto, me sentía profundamente triste. Había llegado al otro extremo de lo que es el agotamiento, me sentía en un completo duelo, una parte de mí parecía haber muerto contenida en esa especie de vida religiosa. Irónicamente, me llamaba «Lumen» (luz), pero sentía cómo mi luz interior se había apagado.
La única paz que sentía era la de imaginar dejar esa vida y la esperanza —a pesar de todos los miedos de volver al mundo a los 30 años, con la cabeza rapada y un vacío de 8 años en el currículum— de que algo podía ocurrir en mi vida que fuera mejor de lo que estaba viviendo.
Y este ha sido mis 12 años allí. No ha sido fácil y sigue sin serlo, abrir camino en esta sociedad capitalista es difícil, pero tengo buenos aliados visibles e invisibles que me ayudan.
• Mi director espiritual me dio el visto bueno para pedir el indulto de salida, así que se lo pedí a mi superiora y ella inmediatamente pensó que yo estaba teniendo un ataque de nervios, -si analizamos en retrospectiva, así era-. Quería enviarme al monasterio unas semanas o a California «para descansar». Intenté explicarle que esto venía de hace mucho ¿era posible que no se diera cuenta? Un descanso de 2 semanas en el monasterio no arreglaría aquello. Finalmente, mi petición fue dirigida a la Superiora Provincial y tuve que mantenerme en contacto con ella para asegurarme de que mi petición seria escuchada y saber cuándo podría volver a casa. Pasó un mes hasta que por fin me dieron una fecha para irme, el 19 de septiembre.
Abandono y maltrato
Llevo 3 años trabajando «entre bastidores», en una consulta excepcional de terapia dialéctica conductual, con un conocimiento cercano y personal, tanto de la modalidad como de los tipos de cliente típicos que mejor se ajustan a los criterios de ese tipo de terapia. Puedo decir con seguridad que el hecho de que las superioras se negaran a permitir el tratamiento a esa hermana con trastorno límite de la personalidad (incluso en régimen de internamiento) fue una negligencia, ya que, ella estaba causando daño a sí misma y a las de su comunidad.
Esa Orden religiosa se enorgullecen de «cuidar de los suyos», una estupidez escrita en sus Constituciones, en este caso y en tantos otros, vemos la negligencia y los cuidados insuficientes que tenían. En mis tiempos, rara vez enviaban a una hermana enferma de vuelta a casa, bajo lo que dice la misma regla, pero estoy segura que esta hermana en particular se habría negado vehementemente ante tal propuesta, pero algo habría que hacer, pues la realidad era la de una una mujer joven, diagnosticada con trastorno límite de la personalidad, recomendada por escrito hacer una terapia dialéctica conductual residencial por su psiquiatra, y la Orden a la que pertenece se negaba a proporcionarle el tratamiento para que tuviera una salud mental estable. Siendo las consecuencias:
• un sufrimiento diario para esa hermana que constituía en subidas y bajadas de emociones incontrolables,
• que las demás tenían que sufrir sus arrebatos de ira, su volatilidad emocional y manipulación con regularidad, sin que supieran el por qué,
• su superiora, como yo misma, tuve que hacerme cargo y cuidar de alguien que padecía una enfermedad mental y emocional crónica, sin tener ninguna formación particular ni apoyo profesional en este tipo de función, y al mismo tiempo tenía que cuidar del resto de la comunidad, de las responsabilidades del apostolado, asumiendo también responsabilidades de la provincia.
SIN MENCIONAR que nadie se preocupaba por mí, Me la enviaron con un libro, al estilo manual de preparación para vivir con una persona enferma. No logré que le asignasen un terapeuta cuando realmente lo necesitaba; no logré que me enviaran una hermana más para ayudar en el apostolado, es decir, no recibí ningún tipo de apoyo regular para hacer frente a todo esto sola.
Todo lo que estaba a mi alcance era llamar por teléfono a la superiora provincial cuando la situación se ponía realmente fea y salía del control, pero nunca se hizo nada para cuidar de mi salud mental y emocional.
Desde aqui mando un saludo a mis padres
Menos mal, que crecí en un hogar estable y con vínculos seguros, menos mal que tuve una educación sana y tuve siempre los pies en la tierra, con un sabio discernimiento, profundas habilidades intuitivas y la capacidad de gestionar mi mundo emocional lo suficiente cómo para no salir desesperada corriendo de allí cuando un día se desató toda la mierda; y menos mal que siempre he tenido la capacidad de aprender rápidamente, pues esto me ayudó a sobrevivir a toda aquella locura, y ahora entiendo porqué me cargaron con todo, las que han estado en esa Orden entenderán: ¡APOYA SIEMPRE A TUS SUPERIORAS!
Pero, ¿Qué están haciendo SSVM?
Es como tener a los 5 titulares de un equipo de baloncesto, que son los que más minutos juegan y los que más apoyan al equipo, pero ninguno de ellos participan de otros beneficios, cómo por ejemplo, ir al quiropráctico, a la sauna, ni comer comidas buenas y nutritivas, etc. Cómo se explica todo esto sin hablar de negligencias y abusos.
Y no me hagas hablar de cómo se nos enseña a ser «generosas con Dios», pues de esta forma «Dios nos dará la gracia para cualquier cosa que se nos asigne». Eso no es más que un lavado de cerebro para que te calles y seas una monja buena y callada; para que te sientas culpable y que ante cualquier pensamiento contrario vayas a confesarte, cuando literalmente son ellos los que están chupando la vida que Dios te ha regalado. ¿Bastante retorcido, no? ¡Bienvenidas al convento!
(Estoy redactando esto).
¿Nos hemos apuntado todas a una vida de servicio, obediencia y «muerte al yo como Cristo en la Cruz»? De hecho, sí. Pero ¿sabíamos que sería tan disfuncional y perjudicial para nuestra propia salud mental, emocional y física? ¡No! Deberíamos, entonces haber leído «la letra pequeña».
En mi opinión, al aplicar la frase: «¿Qué haría Jesús?», -lo que para mí es una pregunta básica del cristianismo-, las SSVM hicieron lo contrario. Tendrían que haberse preocupado, haber permitido y haber conseguido un lugar para el tratamiento de esa hermana con trastorno. De esta forma le ayudaría no solo a ella, sino a las hermanas que tenían que convivir con ella y a la superiora a su cargo, y no solo con miras al presente, sino también al futuro. No se puede negar algo así por falta de medios económicos, porque las SSVM, SÍ TIENEN FONDOS.
Resumen
También escribo cosas positivas sobre mi paso por la vida religiosa, lo he dicho una vez y no cambiaría la decisión que tomé de entrar en las Servidoras. Es un camino de vida poco común que me siento agradecida de haberlo recorrido, pero he de decir que ha sido profundamente perjudicial para muchas de nosotras.
Mi historia es una de las más «ligeras», no sufrí insultos, no sufrí maltratos, no me enviaron a casa sola y sin dinero, cómo hicieron a otras. Me llevaron de regreso a casa dos hermanas, probablemente porqué yo había sido superiora durante 4 años y sentía que las hermanas me apreciaban o, quizá, porque simplemente era una chica blanca y norteamericana, ¡quién sabe! Pero hay otras historias tristes y lamentables y que causaron más daños. La mía entraría dentro de los traumas crónicos y de larga duración, a lo mejor, somos menos, ¡pero existimos!
A principio de este año recibí la noticia de una hermana con la que había vivido que había decidido irse, llevaba unos 20 años de vida religiosa y eso me preocupa, rezo para que esté bien. Le hemos tendido la mano, pero ahora mismo no quiere ningún tipo de apoyo. Muchas estuvieron menos tiempo que nosotras, pero con historias igual de intensas. Ambas son válidas y perjudiciales.
Cada una de nosotras buscamos sanar y as veces el proceso es largo, pero diría que la dificultad está en que nuestras historias conventuales son difíciles de visibilizar porque todo pasa en un ambiente con mucho secretismo y nadie sabe REALMENTE lo exigente que es la vida que llevamos y el lavado de cerebro que hay, al menos que lo haya vivido.
Repetiré siempre que se trata de una secta y no lo suavizo, pero cómo todo está bajo una fachada que gran parte del mundo honra —monjas haciendo obras de caridad, ayudando a los más pobres entre los pobres, esposas de Cristo— es difícil separar lo virtuoso de lo dañino, pero las 2 pueden coexistir.
Sin embargo, aquí estamos. Intentando llevar nuestras historias, nuestros secretos y heridas de la mejor manera posible; intentando convertirlos en magia y servicio en este mundo, a menudo con el alma un poco cansada y llena de cicatrices por lo que hemos pasado; intentando seguir sin «quemarnos», una vez más y sin que se aprovechen de nosotras siendo un poco más sabias e indecisas a la hora de entregarnos por completo a algo.
Y Esta es la razón por la que no quiero trabajar a tiempo completo nunca más. Haber sido monja era un trabajo 24/7 sin límites. ¡Es una mierda salvaje!
Después de mi salida, «me quemé» otras 3 veces más en el mundo laboral a tiempo completo, y aunque, esto no es objetivamente un problema por lo que todos enfrentamos, simplemente he decidido que, ya no es para mí.
Sólo quiero tumbarme en la hierba, contemplar la brisa entre los árboles y jugar con gatos el resto de mis días, y bailar, por supuesto.
Dirigida por Alberto Lecchi y estrenada en cines el jueves pasado, «Caminemos Valentina» cuenta la historia de Migliore y Valentina Rojas, dos exmonjas que sufrieron abusos durante sus años de Aspirantado y Postulantado en la congregación «Hermanas Educacionistas Franciscanas de Cristo Rey».
Sandra, oriunda de Córdoba, Argentina y con muchos años de vida religiosa decide dejar la congregación. No sabiendo cómo sobrevivir económicamente, que el Instituto la incorpora en unos de sus colegios de Lanús como administrativa.
Allí llega Valentina como religiosa y representante legal. Compartían la tarea diaria cuando empezaron llegar a la institución e-mails con denuncias sobre los abusos de la hermana Bibiana, una monja encargada de la formación de las jóvenes durante una década, los años 80. Sandra y Valentina habían sido también sus víctimas, pero casi nadie lo sabía. No lo habían hablado entre ellas ni con nadie más. En ese período en que empieza a conocerse la verdad se ubica temporalmente la mayor parte de la película.
La reacción de Valentina sobre Bibiana:
“Con la idea de que era una madre para nosotras, ella iba propiciando un contacto cada vez más cercano, más íntimo, que desembocaba en manoseos y en un abuso sexual y de poder sobre nosotras, adolescentes, vulnerables, asustadas. No era como hoy, que los jóvenes reciben una formación mayor sobre lo que pueden permitir de los adultos. Hace casi 40 años no se hablaba, y mucho menos dentro de una congregación religiosa. Cuando me di cuenta… ‘Esta mujer me está tocando de una forma que no es maternal’. Encima, ella te hacía saber que tenía que quedar en secreto y te culpaba de todo lo que sucedía: ‘Vos me haces hacer esto’. Y yo sentía todo con culpa y muchísima vergüenza”.
Mientras Sandra conoció a la hermana Bibiana en el noviciado, apenas ingresó, en 1983. “Cuando, muchos años después, hablé por primera vez de lo que me había sucedido con ella, un sacerdote me dijo: ‘Esto no fue culpa tuya ni es un pecado que confesar, esto lo tienen que saber los superiores’. Pero hablé con los superiores y me mandaron a callar: ‘Esto no puede trascender las paredes de este lugar’”. Sandra dejó los hábitos y se alejó de la Iglesia, pero volvió al colegio porque necesitaba trabajo. Quiso retomar su puesto de docente titular; no la dejaron. Le dijeron que era “una vergüenza volver y trabajar frente al alumnado sin el hábito”.
Pero la supervisora le ofreció el trabajo administrativo –primero a escondidas de la institución– a cambio de que nunca dijera nada. Ella cuent
“Ella era una persona mayor que había sido realmente como una madre para mí en los primeros años en Buenos Aires. Me callé por eso y porque necesitaba trabajar. Yo tenía 24 años y muchas inseguridades”.
Cuando llegaron los e-mails a las casillas de todas las monjas y ex monjas de la congregación en Buenos Aires y Formosa, donde había trabajado también la hermana Bibiana –allí era la hermana Leopoldina–, la supervisora de Sandra le preguntó qué opinaba sobre el tema:
“Le dije que no opinaba nada: que me constaba que era cierto porque yo también había sido su víctima”.
El caso no tuvo mayores consecuencias, salvo para ellas, después de que enviaran las denuncias a la madre general de la congregación, con sede en Roma. A raíz de eso, Sandra fue desplazada de sus tareas y Valentina recibió la seductora propuesta de irse a Europa, pero en lugar de aceptar, renunció. La única respuesta positiva fue la promesa de separar a la hermana Bibiana de la congregación, pero no sucedió:
“Bibiana se escapó, se fugó a Venezuela. Cambió su nombre, seguramente apañada por la congregación. Hoy se hace llamar Victoria y trabaja en un hogar de ancianos. Sigue siendo monja”.
El director de la película, Alberto Lecchi, dijo muchas veces: la película no quiere ser un ataque a la Iglesia ni a la fe de las personas. Es una situación concreta que ocurrió dentro de una institución y también una denuncia a quienes dentro de esa institución siguen encubriendo o mirando para un costado”.
A raíz de este film se nos vino a la memoria los distintos de casos de abusos que sufrió el IVE y sigue sufriendo dentro y fuera de sus puertas. Mientras los moralistas y biblistas del IVE se creen el ala más ortodoxa y fiel de la Iglesia, al mismo tiempo debieron crear una residencia que trate a sacerdotes con problemas sexuales de diferente tipos, depresiones, ansiedad etc.
Sin ir más lejos hace unos días nos escribió el P. Enzo C. (IVE), agrediéndonos por ser voz de los que no tienen voz, paradójicamente nos dicen que escandalizamos, ¿¿y ellos??
Puntualmente este sacerdote se fue en Brasil con su monaguilla, no tuvo mejor idea que vivir frente del seminario… pero ellos ahí no escandalizan… para ellos no aplica el escándalo. Si todavía es un fanático del IVE y el P. Buela entonces tiene todo perdonado, por eso cuando se cansó de su vida conyugal se lo volvió a admitir y se lo traslado de misión a Chile. Al menos en su caso como él dice, pidió perdón a sus superiores y siguió adelante, ojala sus superiores aprendan y pidan perdón a las víctimas de tantos abusos dentro del IVE y que siguen sin reconocer. Lamentablemente los mismos miembros del IVE, sobre todo los más jóvenes no saben la doble vida que tiene el IVE, y la manera de tapar las cosas.
¿Cuántas religiosas hablaron de abusos a sus superiores cometidos por sacerdotes y solo se trasladó el problema? O lo que es peor pusieron a trabajar con jóvenes del colegio a sacerdotes que después se enteraron que tenían HIV (que había contraído por su lujuriosa vida en la misión) y que seguía ahora desparramando en Argentina hasta que alguien denunció públicamente y no les quedó otra que allanarlo al estado seglar, sino es la hora que sigue en otra misión
¿Cuanto luchó el IVE por tapar el problema de abusos y alcoholismo del fundador?
El problema del IVE y de muchas Instituciones es que hay que defender más la institución que los miembros, los miembros son piezas que van cayendo rotas en el camino y no se habla más. Se remplaza por otras piezas jóvenes que solo ven la santidad reinante en el ambiente y no conocen de historia ni pasados. Hasta que esa pieza se desgaste y sea remplazada.
Algún día con el tiempo las víctimas se irán animando a hablar y con esto se ayudara a que las instituciones miren por las almas que Dios les encomendó que por el fanatismo de defender la institución.
Hace muy poco fallecía en Roma el cardenal Angelo Sodano. Secretario de estado de dos papas (Juan Pablo II y Benedicto XVI), fue además nuncio apostólico en diferentes países. Se dice que fue uno de los hombres más poderosos del Vaticano; ocupó el cargo más importante después del papa durante 16 años. Siempre se supo dentro del Vaticano que Sodano dirigía la Iglesia en los últimos años de la vida del Juan Pablo II, cuando lа salud del papa se deterioró con el Parkinson.
En una serie de denuncias en el National Catholic Register en 2010, el autor Jason Berry, un destacado experto en la crisis de abuso sexual de la Iglesia, escribió cómo Sodano impidió que el Vaticano investigara al padre Marcial Maciel, el fundador caído en desgracia de los Legionarios de Cristo.
Después de la muerte de Juan Pablo II, Benedicto XVI intensificó las investigaciones sobre Maciel y lo destituyó en 2006, cuando el Vaticano reconoció que las acusaciones que había ignorado durante décadas eran ciertas. Los Legionarios de Cristo, cuyas reglas prohibían criticar a su fundador o cuestionar sus motivos, reconoció más tarde que Maciel, quien murió en 2008, vivía una doble vida como pedófilo, mujeriego y drogadicto. Una demoledora investigación que denuncia cómo Maciel habría comprado su protección en Roma con donaciones a Sodano y otros pesos pesados de la vieja guardia de Juan Pablo II.
La investigacion asegura que Maciel pagó a Sodano US$10.000 por una charla y le organizó el banquete de 200 cubiertos por su nombramiento como cardenal en 1991. Maciel también contrató a un sobrino de Sodano, Andrea, ingeniero, para la construcción de la fastuosa universidad de la orden en Roma. Otra reputada publicación, America, de los jesuitas estadounidenses, reaccionó así:
“Hay un cardenal cuya cabeza debe rodar, Sodano”.
Revista America (jesuitas estadounidenses)
En 2010, cuatro años después de que el papa Benedicto XVI reemplazara a Sodano como secretario de Estado, el cardenal Christoph Schoenborn de Viena acusó a Sodano de haber bloqueado una investigación a gran escala del ex cardenal austriaco Hans Hermann Groer. Schoenborn dijo a los periodistas que el cardenal Joseph Ratzinger, que entonces dirigía la Congregación para la Doctrina de la Fe, quería una investigación a gran escala sobre Groer en 1995, pero esta fue bloqueada por Sodano.
Groer renunció como arzobispo de Viena en 1995 luego de acusaciones de que había abusado sexualmente de jóvenes seminaristas en el pasado. Murió en 2003 y nunca admitió culpabilidad ni enfrentó cargos.
Tal fue su influencia que una vez se comentó que
«una hoja no se movía en el Vaticano a menos que el cardenal Sodano lo quisiera».
De hecho fue uno de los que promovió a McCarrick como arzobispo y cardenal de Washington DC.
Para sus críticos, el estilo de liderazgo de Sodano personificaba un enfoque que priorizaba la reputación de la Iglesia institucional, antes que las víctimas. Así no solo ocultó lo de Maciel y Groer, sino en Chile también con el padre Karadima, con quien tenía una relación cercana, no informando sobre las denuncias de las víctimas y promoviendo a sus jóvenes con altos cargos en Chile, su ocultamiento en la realidad de denuncias sexuales ocasionó un escándalo en que los obispos chilenos tuvieron que poner su renuncia a disposición del Papa.
Francisco finalmente le aceptó la renuncia de presidente del Colegio Cardenalicio luego que saliera en todos los medios la cantidad de encubrimientos y abusos en el que había incurrido y las famosas declaraciones de la expresidenta de Irlanda, Mary McAlesse afirmaba que el cardenal Sodano le había pedido
“proteger los documentos referidos a los abusos sexuales en 2013”,
caso contrario Irlanda debería indemnizar al Vaticano como compensación por las investigaciones de abuso.
Finalmente, Sodano se fue de este mundo sin pagar por ninguna de sus culpas, pero recordado por todos como el padrino del Vaticano:
“uno de los hombres más corruptos del Vaticano”.
¿Qué relación tiene Sodano con el Instituto del Verbo Encarnado?
P. Gonzalo Ruiz IVE, archivero del Colegio Cardenalicio
Sodano seguía muy de cerca todas aquellas instituciones nuevas con gran cantidad de jóvenes sacerdotes y muy dóciles por sus regímenes de constituciones. Y lo mismo hizo con el IVE, cuando vio el creciente número de jóvenes en este instituto, la docilidad de los mismos tuvo una cercanía estrecha con Buela por medio de lo que él llamó: “mi queridísimo padre Gonzalo Ruiz”.
Quien había sido en su juventud secretario personal de Buela, ahora pasaría a tener un cargo nombrado por el mismísimo cardenal en el Colegio Cardenalicio como archivero del mismo, cargo que sigue ocupando actualmente.
Cuando empezaron a venir los tiempos turbios para el IVE, Sodano intervino para que el IVE siguiera en pie y logró que le permitan al IVE trasladar su casa generalicia a Roma. Juan Pablo II aceptó siempre y cuando cerraran las casas de formación en San Rafael, cosa que no hicieron.
Tiempo después el papa Juan Pablo II enfermó y Sodano, que comandaba todo en Italia, logro salvar al IVE de un cierre inminente. Gracias a Sodano el IVE sigue en pie. Aunque obviamente Buela comunicó que el mismo Juan Pablo II fue el que intervino a favor del IVE y envió en todas sus comunidades levantar una efigie en su honor y nombrarlo como «padre protector».
Sodano también los salvó de las denuncias: en 1997, Buela recibe una denuncia canónica de abuso sexual grave y al ser la primera denuncia formal, este cardenal logra que la desestimen, sin saber que años más tardes, más de 12 casos se sumarían en la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Si Sodano hubiese dejado que se actúe en 1997, tal vez se hubiese podido frenar tanto daño irreparable.
Prueba del agradecimiento que Buela le tenía por todos los favores que le había hecho Sodano y la gran intercesión que gestionó para salvar el IVE lo publica en su último libro, ahí adjunta cartas de Sodano agradeciendo todos los saludos que los miembros le hacían llegar por su gesto de intercesión en favor del Instituto.
Lo notable en esta carta es el afecto que hace notar tiene Sodano por el “P. Gonzalo Ruiz Freites”, quien lo tuvo muy cercano a su persona y quien hizo de mediador todo el tiempo.
Ahora bien, parece que este sacerdote, Gonzalo Ruiz, tuvo buena escuela de sus maestros, ya que aprendió muy bien a cuidar más de la imagen institucional que de las propias almas encomendadas en formación. Así mientras estuvo en el gobierno general poco y nada hizo en defensa de la verdad. Sin hablar de la cantidad de deserciones, sacerdotes enfermos, denuncias de abusos etc. Su silencio le valió un puesto que hoy conserva.
Total, el Instituto del Verbo Encarnado es una máquina en el que las piezas enfermas o que ya no aportan se desechan y se remplazan por otras. Pero nadie es eterno y ¿tal vez al final de sus días podremos saber la verdad?
Como pasó con Sodano… que pasó a la historia como el mayor encubridor de abusos.
Algunas referencias complementarias acerca de Sodano
En el año 2018 la Congregación para los Institutos de vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica anunciaba el nombramiento de un comisario pontificio para Sodalicio de Vida Cristiana, luego de que la fiscalía peruana pidiese prisión preventiva para su fundador, Luis Fernando Figari, y otros exmiembros de esa organización por delinquir, secuestro y hasta lesiones psicológicas graves en relación con un caso de abuso sexual.
Hoy (21/07/2023) nos enteramos por ACIPRENSA que el Vaticano comisionó una nueva investigación para este instituto, enviando a Mons. Scicluna, secretario del Dicasterio para la Doctrina de la Fe y experto en abusos sexuales (recordemos que tuvo que intervenir en los escándalos abusos sexuales en Chile).
En febrero de 2017 la Santa Sede determinó que Figari adoptó frente al Sodalicio
“un estilo de gobierno excesiva o impropiamente autoritario, orientado a imponer la propia voluntad”
y
“utilizó estrategias y métodos de persuasión impropios, es decir solapados, arrogantes y de todos modos violentos e irrespetuosos del derecho a la inviolabilidad de la propia interioridad y discreción”.
Además, concluyó que Figari
“en algunos casos ha cometido actos contrarios al sexto mandamiento (‘no cometer actos impuros’)»,
para manipular, hacer dependientes y
“controlar más que dirigir las conciencias, sobre todo de los jóvenes en formación”.
Las sanciones impuestas por el Vaticano incluyen que Figari no regrese al Perú, salvo por motivos graves, y que sea destinado de manera estable a una residencia en la que no exista una comunidad del Sodalicio, a cuyos miembros tiene prohibido contactar.
En enero de 2018, el Vaticano nombró un Comisario Apostólico para el Sodalicio de Vida Cristiana.
“El comisariamiento es el mayor tipo de intervención que realiza la Santa Sede sobre una institución católica”
Aciprensa
Hasta aquí hemos leído lo que viene sucediendo con Sodalicio. Cabe destacar que la Iglesia utiliza como último recurso el comisariato como modo de tratar de remediar algo grave dentro de una Institución. De hecho como bien cita Aciprensa es el «mayor tipo de intervención que realiza la Santa Sede sobre una institución católica».
¿Y el IVE?
Ahora, ustedes se preguntarán, pero ¿Por qué el Instituto del Verbo Encarando tuvo más de 5 comisariatos?¿Por qué siguen siendo intervenidos actualmente en su gobierno?
Si para la Iglesia Católica es tan serio tener que hacer una intervención a un instituto, quitarle su autonomía, desterrar a su fundador, gastar recursos y desgastar a obispos, religiosos… ¿Será que solo lo hacer por envidia por las muchas vocaciones que tiene el IVE? ¿Será por que son tan buenos que Dios les regaló este tipo de persecución?
La mayoría de los fundadores que decían esto hoy están presos, como el caso del Padre Rosas (fundador de los Hermanos de San Juan Bautista), condenado a 20 años de prisión; Maciel, ya fallecido y condenado por su misma congregación, que tuvieron que bajar sus cuadros y su proceso de beatificación interno, los de Sodalicio y tantos otros… que repetían a sus miembros lo mismo.
Pero algunos con más libertad de espíritu, como enseñaba el mismo Buela, no pueden quedarse solo con estas respuestas infantiles.
¿Qué sabe la Iglesia que yo no sé para intervenir tantas veces al Instituto del Verbo Encarnado?
¿Qué dice Buela en su autobiografía acerca de los comisarios?
Llama la atención que en el último libro que escribió Buela, donde quería contar todo sobre su vida y la vida del Instituto, al tener que hablar sobre los años de Comisariatos, lo hace muy al pasar.
¿Por qué?
¿Por qué Buela, antes de morir, en su libro de 800 párginas, solo le dedica una página muy al pasar? Cuando al mínimo debería relatar en qué situación se dieron los comisariatos, por qué, la resolución de esas visitas.
Pero no. Mientras menos se enteren sus miembros, mejor. Y si se enteran por afuera serán de curiosos y ponen en riesgo perder la santidad.
Como se puede ver , en el Cap. 47 de su libro, nombra muy al pasar en estos puntos:
2) “Luego por mandato del 3er Comisario, estuve confinado por 15 meses en Loja”
Ahí tiene bien en claro que en ese tiempo ya iba por el tercer comisario, imagínense ustedes que hay órdenes que tuvieron un solo comisario y fue gravísimo, aquí en esa fecha ya va por el tercero y no solo eso se tuvo que tomar la decisión de desterrarlo porque la manipulación que ejercia en sus miembros era tal, que llegaba a transmitir burlarse de los mismos comisarios y todos lo hacían…como lo siguen haciendo en la actualidad y como hemos visto con el payaso del provincial de Argentina recientemente.
3) “De Ecuador Juan Pablo nos hizo venir a Segni”
Ahí, en esa época empieza la amistad de Sodano con el IVE (nos ocuparemos más delante de traer luz sobre esta relación), siendo el mismo Sodano el que le solicita a Juan Pablo II que deje que el IVE tenga su casa generalicia en Roma, para que se los pueda ayudar y ver si se puede salvar esta orden.
Juan Pablo II a cambio les pide que cierren las casas de formación en Argentina, ya que no se ve claro si son capaces de seguir formando con tantas cosas que no cerraban (esta carta de Juan Pablo II se encuentra en los archivos de la Conferencia Episcopal Argentina).
Obviamente nunca lo hicieron y nunca lo cuentan. Desde ahí es que Buela dice que Juan Pablo II salvo el IVE (por permitirles ir a Roma) y se declaró en su muerte tenerlo como patrono especial del instituto.
Obviamente ante tantas desobediencias siguieron circulando comisarios.
5) “El Papa Francisco me mandó por 2 meses al monasterio San Isidro de Dueñas”
En esta época, Buela tenía prohibido acercarse al Instituto. Se le había prometido que se ayudaría a la congregación y a los buenos sacerdotes jóvenes si él dejaba de manipular y dirigir el Instituto. Como respuesta Buela se paseaba por Chile y Argentina, reuniendo a todos los religiosos para dictarles un curso sobre cómo dar Ejercicios Espirituales. Obviamente ahí «bajo línea», impuso su visión persecutoria y el daño en sus adeptos fue mayor.
Conclusión: como castigo se lo envió a un monasterio de otra orden a realizar una vida de silencio y penitencia.
6) “Luego de eso yo iba a ser un religioso más, pero el papa me mando a Génova”
El papa había decidido que tenía que estar lejos de la orden, si quería salvar la obra del IVE, ya que el problema era ÉL y lo que estaba logrando en sus sacerdotes. Se había decidido recluirlo en un monasterio en Francia no perteneciente al IVE. A lo que su consejo general volvió a recurrir a su amigo Sodano implorándole este al papa que le permita refugiarse en una casa del IVE, donde no tendría contacto con nadie de la congregación. Cosa que también no cumplió. Ya que todos iban a verlo en Génova… pero en fin, aquí no era falta de obediencia sino como enseña el Padre Miguel Fuentes (alias «El teólogo responde») no estaba obligado a obedecer leyes injustas.
En fin, escribió esas líneas solo para expresar ¡que sufrió persecución de comisarios!
Nos pareció interesante la entrevista que dio el actor y productor Eduardo Verástegui en relación a su última película “Sonido de Libertad”, película que lucha contra la trata de niños en Latinoamérica y que se está empezando a exhibir en distintas partes del mundo.
Si bien este es un tema muy delicado y doloroso —que esperamos algún día se erradique— nos pareció estar totalmente de acuerdo con este actor en que no hay que quedarse callado nunca más.
Las cosas deben salir a la luz. Los que hacen daños y manipulan lograron hacerlo durante años, y lo siguen haciendo, gracias al silencio y el poco actuar de muchos.
En este blog a diario vemos comentaristas muy cercanos al IVE, algunos miembros de la Tercera Orden, otros sacerdotes etc… defendiendo lo indefendible. A veces algunos son excusables ya que no manejan toda la información; solo ven el exterior: jóvenes alegres buscando la santidad y una congregación con muchos frutos aparentes, y parecería que los que piensan distintos son rencorosos, odian a Dios, a la Iglesia etc… Y así atacan todo el tiempo pensando que defienden una obra de Dios o al mismo Dios.
Esta pobre gente solo se guía de lo que sus superiores le dicen, y creen en ellos. «Es una persecución por lo bueno que somos» y listo; esa es su explicación. Hay que subir todo el tiempo a la web las obras de los misioneros («Aventura misioneraaaa») y los frutos; hay que defender al IVE, cueste lo que cueste.
De las deserciones de los miembros y denuncias, si se habla, es solo para dejarlos mal parados:
son locos, resentidos, se fueron por una mujer, etc.
Esto era propio de Buela. Desde que fundó el Instituto, al sacerdote que se alejaba por que sospechaba algo del IVE, Buela lo dejaba mal parado con algún comentario y sus seguidores no hacían más que repetir lo mismo, año tras año, desparramando eso.
Luego Buela impuso muy fuertemente que el que pensaba distinto tenía «mal espíritu» o calumniaba a sus superiores; por lo tanto, el que pensaba distinto en algo caía en desgracia y habría que segregarlo de la manada. Todas técnicas repetidas y usadas en una secta. Pero claro el IVE solo hace el bien, jamás tuvo culpa de nada; al contrario el fundador fue un santo y solo se habla de la cantidad de vocaciones jóvenes que ingresan.
Lamentablemente los pobres laicos fanáticos defienden lo que ellos creen conocer a fondo, pero ninguno vivió dentro más de 20 años, ni fue parte del Consejo General, ni secretario de Buela, ni maneja datos certeros; solo repiten lo que superficialmente ven y les dicen.
Pero, así todo, se dan el gusto de atacar a los que sí vivieron y fueron parte de hacer crecer esa obra; algunos dieron la mitad de sus vidas dentro, hasta que descubrieron horribles manejos que, si los seguían ocultando, serían cómplices, y decidieron no quedarse callados.
En esto la tecnología ayudo mucho. Hace tiempo salían cientos pero volvían a sus países sin que nadie supiera nada de su verdad, de su historia, solo lo que el IVE repetía. Hoy, gracias a la tecnología recibimos de todas partes del mundo, testimonios escalofriantes. Desde abusos sexuales cometidos por sacerdotes del IVE hasta manipulación de todo tipo.
Esta pobre gente obsesiva con el IVE no puede explicar
por qué salieron más de 200 sacerdotes,
por qué tienen diferentes denuncias de abusos de diferentes tipo,
por qué hay tantas religiosas enfermas con depresión y distintos trastornos (como la misma superiora general holandesa que tuvieron durante años de superiora general y que de repente la sacaron de escena y la enviaron silenciada a una misión con 3 hermanas y enferma),
o cómo el antiguo provincial del IVE en Brasil hace poco abandonó el Instituto motivado por la falta de información verídica que le transmitían sus superiores y demás escándalos encubiertos en Brasil.
Y así se podría enumerar cientos de casos:
religiosas abusadas por sacerdotes,
manipulación psicológica de muchos y muchas,
explotación laboral de las Servidoras por parte del Instituto del Verbo Encarnado,
tantos otros que pasan por la residencia pensando que el problema son ellos y no el Instituto,
o todos aquellos que fueron testigos de los problema de alcohol del fundador y que del tema no se podía hablar, sino ¡debías irte por no tener el espíritu del Instituto!
Y por supuesto habrá muchos que dirán es mentira, porque yo viví y a mí no me paso nada… Y es verdad, a algunos no les pasó nada, o no supieron nada… y eso pasa en todos lados. Los pervertidos escogen a sus víctimas, hay un patrón… no todos les da lo mismo; y así por ejemplo en la congregación de los Legionarios de Cristo de los 5.000 religiosos solo 20 fueron abusados y no por eso el fundador fue un santo.
Pero no solo abusos sexuales. Si estás dentro y no viviste ese tipo de abusos, seguramente viviste otro tipo de abuso que desencadena hoy en día en muchos de los que están adentro enfermedades como la depresión, agotamiento extremo, problemas de alcoholismo, etc.
Obviamente esto se empieza a reflejar después de los 35-40. Antes, los jóvenes queman su reserva por una causa que creen que es divina y en el fondo ha sido un capricho de Buela que todavía la Iglesia deberá revisar si fue de inspiración divina o no.
Pero bueno el IVE de esos frutos no habla. Deberían hacer un video de todos los primeros sacerdotes. ¿Dónde están esos frutos ahora? ¿Dónde está el primer superior general? ¿Dónde están los primeros sacerdotes misioneros? Uno vino de África contagiado de HIV por su mala conducta, lo trajeron a Argentina, lo escondieron en un monasterio y siguió contagiando a muchas jovencitas indiscriminadamente… mientras el IVE lo tapaba durante años… hasta que alguien lo denunció y ahí recién el IVE decidió lavarse las manos y devolver el paquetito a su casa.
Y ni hablar de los problemas de las religiosas: superficialidad al extremo, infantilismo, intentos de suicidio, depresiones y muchas cosas más de las que aquí se reciben testimonios a diarios denunciando estos casos.
Pero en fin, estos pobres laicos fanáticos, están excusados ya que no manejan ni siquiera el 10 por ciento de la información, a eso se suma que como la iglesia está viviendo una crisis especial, el IVE aprovecha la volada para justificar que a ellos lo persiguen por ortodoxos y buenos como a todos y así logran que estas buenas familias les den sus hijos sin saber que esos jóvenes después de una cierta edad, si son inteligentes y autónomos logren salir del redil pero no sin secuelas.
Gracias a todos los que decidieron no quedarse callados es que hoy al fin se va desenmascarando la verdad y el manejo interno del IVE hacia sus miembros. ¡Esto hará que los verdugos dejen de jugar con las vocaciones que Dios les envía y dejen de arruinarle la vida a tanta gente!
Como todos sabemos, Carlos Buela fue obligado por la Iglesia durante años a alejarse del gobierno del Instituto y vivir recluido en Génova (al mejor estilo Marcial Maciel); su entorno le aconsejó durante ese tiempo que aprovechara a escribir su vida o el legado para el Instituto.
Como ustedes saben, por las denuncias que tuvo, ya no pudo tener jóvenes sacerdotes o seminaristas que oficiaban de secretarios, como siempre los había tenido, ya que el 90 % de los secretarios de Buela terminaron abandonado el Instituto y algunos incluso el sacerdocio; muchos de ellos escandalizados por los problemas de alcohol de su fundador, sus malos tratos, otros por sus abusos de diferentes tipos y el otro 10% que aún quedan en el Instituto sienten que todas las caricias y tratos que recibieron fueron por su especial favoritismo del fundador hacia su persona, por la que solo les resta como obligación ser y transmitir la enorme carga salvar al Instituto del Verbo Encarnado, cueste lo que cueste.
Es así que, durante el último tiempo de su vida, estuvo cuidado por religiosas Servidoras del Señor y la Virgen de Matará. El problema aquí sería que Buela siempre para escribir sus libros contó con la ayuda de sus secretarios sacerdotes; es más se dice entre los pasillos del IVE, que la gran mayoría de los libros de Buela fueron escritos por sus secretarios que luego se los daban a Buela para que los leyera y se los corrigiera; pero el trabajo siempre era de los secretarios.
Esto se puede comprobar en su última obra “El Señor es mi Pastor”, una obra que escribió ya estando recluido en Génova, y en sus últimos años. Un libro de 884 páginas… no de lectura ágil sino un recopilado de datos familiares, árbol genealógico, detalles muy insignificantes sobre distintos momentos de su vida y a todo esto en cada capítulo pegando algún texto espiritual de algún santo para que el libro tenga algún aporte para el espíritu.
Por supuesto evita contar sobre detalles importantes de su vida, como por ejemplo por qué fue recluido, por qué lo persiguieron tantos años. A referencia de eso es que en el prólogo solo agrega: “No relataré las distintas vicisitudes que por gracia de Dios me tocó vivir, porque tendría que escribir otro libro, porque algunos que las produjeron no podrán defenderse y por qué no quiero perder tiempo en esas cosas”.
Lamentablemente esa pérdida de tiempo a la que se refiere le hubiese hecho un gran bien a su congregación, ya que se fue sin explicar
por qué nunca hizo un tratamiento para salir de su problema de alcohol,
por qué tantos años de difamación a tantos buenos sacerdotes,
por qué se alejaron los primeros sacerdotes como Sáenz, Ezcurra, etc.,
por qué las ansias de fundar en todas partes del mundo aunque sea enviando un solo sacerdote,
por qué siempre su medio de santificación era humillar chabacanamente a sus sacerdotes,
por qué abandonaron más de 200 sacerdotes del IVE en los últimos años
y un sinfín de preguntas que obviamente no están en este libro.
Y continúa diciendo que algunos no podrán defenderse. ¿No será que al revés, que la iglesia se vería obligada a aclarar muchos puntos que, para no escandalizar a la grey, dejaron que mueran con él? El deal era: él debía retirarse y esconderse en Génova y la Iglesia no haría pública las denuncias hacia su persona y los graves problemas internos del IVE.
Pero como todo lo que hace el IVE es a escondidas, a semejanza de su fundador, apenas murió su fundador comenzaron a enviar a sus provinciales y algunos sacerdotes el libro digital, “la última obra del P.Buela”, pero no a todos. No todos los religiosos pueden tenerlo aún, ya que como no tiene ningún tipo de autorización eclesiástica… no vaya a ser que se entere el comisario pontificio, quien les dejó expresamente prohibido que se ensalce la figura de Buela, ya que pesaban sobre el causas penales y eclesiásticas. Así que todo es top secret.
Hasta que en España ya salió la edición impresa y se entregó en los conventos de Europa, en Sudamérica todavía no llegó a todos. Solo los superiores tienen la gracia…
Y como tenemos varios lectores del Instituto del Verbo Encarnado y no nos gusta ese tipo de discriminación es que lo dejamos aquí a disposición de todos.
Aquel que tenga tiempo y paciencia corrobore por sí solo y haga un análisis de esta psicología narcisista que logró tener cautivos a cientos.
Este artículo es traducción del holandés del artículo publicado por KN.nl
El excardenal Theodore McCarrick no es competente para ser juzgado en Massachusetts por agredir sexualmente a un adolescente hace casi 50 años. Esta es la opinión de un médico especialista que examinó al hombre de 92 años en nombre de la fiscalía.
En febrero, un experto de la defensa llegó a la misma conclusión . Ahora que el fiscal también ha confirmado la incompetencia de McCarrick, esto podría llevar a que se retiren los cargos en este caso. McCarrick está acusado de asalto y agresión contra una persona mayor de 14 años.
Demencia
El informe del fiscal en sí no se hace público, pero se cree ampliamente que McCarrick sufre de demencia. Eso también hace que sea poco probable que aún pueda ser juzgado después del tratamiento médico.
En una audiencia el 30 de agosto, el juez considerará los informes tanto de la acusación como de la defensa. Si McCarrick es juzgado y declarado culpable, podría enfrentar hasta 15 años de prisión. McCarrick se declaró inocente en septiembre de 2021.
Peligro legal no pasado
Incluso si este caso se desestima en Massachusetts, el peligro legal no terminará para el hombre que alguna vez fue considerado uno de los clérigos más poderosos de la Iglesia estadounidense. Se enfrenta a una acusación similar en Wisconsin.
Además, los abogados de la víctima en el caso de Massachusetts ya han anunciado que iniciarán una demanda civil si McCarrick es declarado incompetente por un tribunal penal.